Tanto tiempo sin saber de ti. No sé qué hss hecho, cómo te ha ido. Conseguiste trabajo? Estás en la ciudad? Me lees? Como te va? Tengo tantas preguntas que hacerte. Sabes, de alguna manera extraño a mi amigo, a mi confidente. Han pasado ya varios meses desde esa última vez que te vi, que pensé en regresarte esa pulsera que me regalaste cuando me fui a Australia. Fue lo mejor que pude haber hecho.
Sabes, creo que entiendo lo que pasó, creo que te entiendo de alguna manera u otra, estando yo en tu posición, hubiera hecho lo mismo, para no hacerte más daño, para dejar pasar el tiempo. No pienso mucho en ti, pero los días que te recuerdo, como hoy, te recuerdo bien. Recuerdo los momentos lindos, y recuerdo lo bueno. Y cuando comienzo a pensar en algo malo, me detengo por unos momentos, para no olvidar aquello bueno que viví a tu lado.
Creo que nunca sabré lo que realmente sucedió, me gusta pensar que fuiste en búsqueda de ti mismo, pues te habías perdido un poco en un abismo infinito sin poder volver a la realidad. Todos tenemos nuestros problemas, sólo hay que encontrar la manera de luchar contra ellos.
Yo estoy muy bien, por si te lo preguntabas, y por si lees esto. Creo que nunca había sido tan feliz. Estoy por terminar mi aventura aquí en Europa y fue todoo y más de lo que esperaba. Todas estas hermosasss ciudadesss. Toda la historia, la cultura, TODOO. He conocido a tantas personas. He tenido mis aventuras, mis escapadas, todo lo he vivido, como debe de ser.
Espero que estés bien. Un besote.
Erika
