Con la novedad de que salí con un niño como que me llama la atención pero ya no sé ni en qué plan o con qué intenciones. Salió así como de la nada el ¿hacemos algo el fin? Y pues va, salimos, me la pasé muy bien, pero terminé como una incógnita de ¿qué demonios pasó?
Pasó por mí, fuimos a un barecito cerca de colinas donde tomamos uno que otro litro y platicamos de 'n' cosas, no suelo ser muy abierta en mis pláticas pero por algún motivo terminé platicando de la familia, del trabajo y mis pasiones por el baile. La noche se fue bastante rápida, nos corrieron del barecito susodicho con las nuevas reglas de Monterrey de todo cierra a las 2 am y ya íbamos de regreso cuando nos da hambre. Paramos por unos tacos rebuenos, y otra plática larga más me hace llegar a las 4 am a mi casa.
Digamos que este es el tipo de chico que a una niña le interesaría bien. Chico inteligente, con trabajo estable, de familia, amigable, músico, buena onda, buen amigo, independiente... y pues cuando una se topa con una persona así, es difícil no caer.
Odio cuando no te queda claro si fue un 'salimos a echar desmadre' o 'salimos porque me interesas'. Mi mejor amigo dice que no me haga ilusiones, que al parecer el chico parece estar buscando más desmadre que algo serio, supongo le haré caso. Es más fácil pensar que nada es y llevarte la sorpresa de que sí a estar pensando que es y luego resulte que no.
Ya ven, por esto sigo soltera, qué complicado es esto.
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