Tuesday, March 24, 2020

La tecnología acorta la distancia

En estos momentos de cuarentena la tecnología es tu mejor amigo, ahora más que nunca. Es chistoso porque anteriormente (antes del Corona Virus) hubiera estado muy conectada a mis redes sociales para matar el rato. Pero con el sacrificio de cuaresma de este año, estoy sin facebook y sin Instagram. Así que he encontrado tiempo para hacer otras cosas, como escribir en este blog.

Hoy tuve sesión de Zoom (que por cierto, no es publicidad pagada ni nada), pero qué bien funciona para las videoconferencias. Recién lo contratamos en el trabajo y ahora le estamos sacando más provecho que nunca. Recientemente he estado más cercana al equipo de mi oficina, en las comidas nos sentamos a platicar de un tema interesante, discutimos ideas de negocio, resolvemos acertijos, criticamos a nuestro querido presidente, entre otras cosas. Y ahora con el Home Office, nos hemos perdido de tanto. Pero.... llegó Zoom para salvarnos. 

Hoy nos conectamos a Zoom a la hora de la comida para platicar y debo decir que lo disfruté bastante. Todos en sus respectivas casas comiendo, mientras videochateábamos en Zoom. Cómo ha cambiado todo en estas últimas dos semanas. Este CoronaVirus va para largo y lo mejor que podemos hacer hoy por nuestro país es NO SALIR DE CASA. 

Así que hasta nuevo aviso, usen Zoom. Conecten con su gente, hagan videollamadas y aprovechen para tener tiempo de calidad con la famila.

Hasta aquí mi reporte, les dejo la foto de la videollamada de la comida de hoy. ¿Notan mi cara de felicidad?


Sunday, March 22, 2020

Día 7 de Cuarentena

A raíz de todo este tema mundial de #coronavirus, toda esta semana estuve en casa trabajando de home office y descubrí que me gusta estar en mi casa más de lo que hubiera pensado. He tenido tiempo de hacer mucha cosas que había dejado pendientes. Me di tiempo de organizar mis álbums de fotos que tenía años sin ordenar; medio ordenar mi cuarto., entre otras cosas.

He pasado más tiempo con la familia, estado mucho más en comunicación con mis amigos. Había estado muy ocupada con el trabajo y llena de viajes que no me había detenido tantito a atenderme a mí. 

Se ha sentido como una semana muy extraña, donde el único tema de conversación es el virus. Pero también he estado mucho más en contacto con mis amigos. Descubrí que conozco poco de las cosas que realmente importan en una amistad, así que me daré a la tarea de acercarme más. Entre todo lo malo que pasa, han pasado muchas cosas buenas también.

Hoy por ejemplo, tuve videollamada con unos amigos, se sintió bonito estar los cuatro conectados ríendo de todo. Cómo los extraño.

Mañana inicia otra semana laboral de home office y otra semana más de aventuras en mi casa. Seguiremos informando.

Friday, March 20, 2020

Reflexiones de Pandemia

Hola! Por alguna extraña razón recordé que tenía este blog y que no había escrito en él desde hace justo 4 años. También me percaté que me aparezco por estos rumbos únicamente en crisis. Pensé que no daría con el blog porque ni el nombre recordaba, pero haciendo búsqueda en mi correo, di con él. Cambié el nombre de la página a algo que asemeje más el tipo de contenido que quiero llevar aquí. Y es más con un blog de historias personales que me ayudarán en el futuro a entender con más detalle cómo es que me sentí en este momento.

¿Por qué es que estoy aquí otra vez? Porque llegó otra crisis a mi vida, una muy diferente a las otras crisis anteriores que podrán leer en posts de hace más de 4 años. Hoy es una crisis mundial y no personal, una que de verdad me ha puesto a pensar en tantas cosas últimamente, que siento que no será suficiente hablarlo sólo en este post. Pero afortunadamente en estos espacios, las líneas no son limitadas.

Empecemos. Hace un par de semanas comenzó a circular información en redes acerca de un virus, que lleva de nombre hoy Corona Virus, o Covid-19. Esta información comenzó a circularse a principios de este año y cuando comenzó, fue visto principalmente por nosotros los mexicanos, yo incluida, como algo que no iba a ser grave, una enfermedad que comenzó a circular de China. Hoy tres meses después, puedo decir que parece que las cosas en México (y en el mundo) salen de control. Me siento como en una película de terror, donde estás en suspenso toda la película porque no sabes qué va a pasar. El caso es, que para estas alturas, la situación se está poniendo gacha, la economía mundial va en picada, cosa seria. Y ocasionado de todo esto, se ha declarado en muchos países ya cuarentena oficial. Los comunicados hablan de recomendaciones de no salir de casa, de permanecer encerrados, que el virus se propaga de forma exponencial. 

Al mismo tiempo, creo que este virus ya me dio a mí, pero no tengo forma de confirmarlo. Los exámenes para hacer la prueba en México están carísimos, escasos y no te harán la prueba a menos de que te estés prácticamente muriendo en el hospital. La desinformación está cabrona y el valemadrismo mexicano en todo su esplendor. 

Pero bueno, eso es para dar algo de contexto. Parece que esto a penas empieza y estos últimos 5 días que declararon Home Office en mi trabajo, me he puesto a reflexionar muchísimo de tantas cosas, he tenido tiempo de pensar. Creo que nunca había sentido este miedo antes, tanta incertidumbre y jamás pensé que yo fuera a salir tan afectada. 

Sin embargo, hoy quiero dejar aquí estas reflexiones antes de que el día de mañana no recuerde el detalle de lo que pensé, el cómo actué y cómo salí de esta bronca enorme. Siempre he sido organizada, precavida y en cierta forma muy cautelosa de mis finanzas. Llevo control hasta de lo que gasto en café, pero nunca tienes en el radar estar preparada para una crisis económica mundial. 

Al grano. De mis reflexiones:

1. En los últimos tres años me he hecho de muchos amigos que considero cercanos y no fue hasta ahora que me doy cuenta que realmente no sé nada de ellos. Si tienen hermanos, su color favorito, a qué se dedican, dónde trabajan, sus historias. Y descubrir eso fue para mí un golpe bajo. Platicando con una de mis mejores amigas descubrí que no la conozco, que puedo reír, compartir canciones, hablar de pendejadas, pero no conozco nada más allá de eso. ¿Cómo es que he podido pasar tanto tiempo "conociendo" a estos amigos y realmente no saber nada verdaderamente importante de ellos?

2. Las redes sociales nos están matando. Ya no convivimos. Vivimos compartiendo memes, riendo y metidos en las pantallas de nuestros celulares. Viviendo al instante. Sintiendo una necesidad interminable de atender todo mensaje de forma inmediata. Sales con tus amigos y hoy parece que platicas con ellos a través del teléfono. Se ha perdido el toque de las llamadas, las visitas, la presencia. Todo funciona a través de tus redes de whatsapp, Instagram, Facebook.... y cada día sale una nueva que también tienes que atender. Hoy en día recibir una llamada de alguien es tan raro como ver un dinosaurio en tu patio. 

3. Estamos más metidos en nuestra vida virtual que la vida real. Asiste uno a festivales de música y ves más personas grabando con el celular que personas bailando al ritmo de la música. Triste de verdad. Preocupados por grabar la historia perfecta, el momento perfecto, que te olvidas de vivirlo y atesorarlo en tu memoria.

4. El mundo. Llevamos años hablando de cuidar de este mundo porque nos lo estamos acabando. Cada vez se escucha más de calentamiento global, de contaminación, noticias de desastres naturales y no estamos haciendo nada al respecto o bien hacemos poco. ¿Dónde nos vemos en 10 años más? No lo sé. Pero seguimos aquí esperando a que la cosa mejore sola. 

Pienso tantas cosas hoy que a veces no encuentro ni el orden para escribirlas. Si esto no hace sentido, una disculpa. Conforme vaya ordenando mis ideas, las voy trayendo a este espacio. 

Por otro lado, creo que ahora sí quiero revivir este lugar. Tengo tantas cosas que platicarles de estos últimos años. Poco a poco vendré a guardar esas memorias aquí.

Dejo esta imagen como algo adicional a mis reflexiones de estos tiempos: